CDMX.-El gobernador de Oaxaca, Salomón Jara, organizó dos eventos en el estado para recibir a Claudia Sheinbaum, jefa de Gobierno de la Ciudad de México, mientras ignoró la presencia del canciller Marcelo Ebrard. Estas acciones se dan en medio de llamados a mantener la unidad y calmar los ánimos dentro del partido.
Durante su visita a Juchitán de Zaragoza y Santa María de Huatulco, Sheinbaum participó en eventos organizados por el gobernador Jara, con acarreos de simpatizantes de las zonas cercanas. Jara elogió la gestión de Sheinbaum en la Ciudad de México, sin destacar algún logro en particular.
«Estamos orgullosos de la mujer que encabeza esta ciudad, la más grande del mundo. Es capaz, tiene mucha creatividad e inteligencia para gobernar la ciudad. El hecho de su presencia en Huatulco es para conocer la gran aportación de este proceso de transformación que lleva a cabo en la Ciudad de México», expresó Jara antes de que Sheinbaum diera su conferencia «Políticas de Gobierno al Servicio del Pueblo».
Jara resaltó el apoyo del presidente Andrés Manuel López Obrador al estado de Oaxaca y destacó los cambios profundos que Sheinbaum ha implementado en la Ciudad de México. Además, planteó la posibilidad de que una mujer pueda hacer historia en todo el país, lo que fue respaldado por los asistentes coreando «presidenta, presidenta».
Por su parte, Sheinbaum repitió el discurso que suele dar en sus giras fuera de la Ciudad de México, aunque cambió el nombre de sus políticas exitosas por «políticas al servicio del pueblo» tras el accidente en la Línea 2 del Metro en enero pasado. Resaltó el otorgamiento de becas para niños de primaria, la inversión en transporte público y el rescate de espacios públicos.
Mientras los eventos para Sheinbaum acaparaban la atención, el gobernador Jara ignoró la presencia de Marcelo Ebrard en la entidad. A través de las redes sociales, Jara justificó la invitación a Sheinbaum, señalando que Oaxaca está inmerso en un proceso de transformación y que les interesaba conocer y estudiar las políticas públicas progresistas y populares implementadas por la jefa de Gobierno.
Sin embargo, en las redes sociales surgieron reclamos hacia Jara por organizar eventos que podrían considerarse actos de campaña ilegales, con un gran gasto presupuestal. Algunos usuarios cuestionaron quién pagó los eventos y cómo beneficiaban al estado.
Estas acciones generan debate sobre la unidad y la forma en que los líderes de Morena están gestionando las campañas electorales, ya que se espera que se mantenga la cohesión y el enfoque en las elecciones de 2023.