CDMX.-Los hijos de Edmund Hillary, neozelandés, y Tenzing Norgay Sherpa, nepalí, presidieron en Nepal la celebración del 70º aniversario de la histórica conquista del Everest, la montaña más alta del mundo, realizada por sus padres.
«La conquista del Everest no solo pertenece a Ed Hillary y Tenzing Norgay, sino a toda la humanidad», declaró Peter Hillary en una escuela fundada por su padre en el aislado pueblo de Khumjung, a una altitud de 3.790 metros.
«De repente, cada uno de nosotros pudo partir», agregó emocionado.
La ascensión al «Techo del mundo» el 29 de mayo de 1953, culminando a una altura de 8.849 metros, cambió para siempre la historia del montañismo y cubrió de gloria a Hillary y su guía sherpa en todo el mundo.
Familiares de ambos escaladores se unieron a los habitantes del pueblo y a las autoridades para inaugurar la Oficina de Turismo Sir Edmund Hillary, que se encuentra en el mismo edificio de la escuela que abrió sus puertas en 1961.
Frente a los retratos de Edmund Hillary y Tenzing Norgay Sherpa, Peter Hillary y Jamling Norgay Sherpa, hijos de los escaladores, cortaron la cinta roja que marcó oficialmente la apertura del centro.
En Namche Bazar, el principal polo turístico en la ruta hacia el campamento base del Everest, también se inauguró un museo renovado en honor a Tenzing Norgay.
En Katmandú, funcionarios y cientos de alpinistas se unieron en una manifestación portando banderines conmemorativos.
Durante la ceremonia, se rindió homenaje a los mejores montañistas nepalíes, incluido Kami Rita Sherpa, conocido como «el hombre del Everest», quien recientemente alcanzó la cumbre por 28ª vez.
Sanu Sherpa, el único alpinista que ha ascendido las 14 montañas más altas del mundo en dos ocasiones, instó al gobierno a apoyar a los guías sherpa, quienes corren grandes riesgos al acompañar a los escaladores extranjeros en sus ascensos.
«El gobierno no ha hecho mucho por los sherpas. Creo que sería de gran ayuda y nos haría felices si el gobierno ayudara a educar a los hijos de los montañistas fallecidos en las cumbres», expresó Sanu Sherpa a AFP.
En las últimas siete décadas, más de 6.000 alpinistas han llegado a la cima de la montaña más alta del mundo, según el Himalayan Database, pero más de 300 escaladores han perdido la vida en el mismo periodo de tiempo, incluyendo 12 este año.
Con cinco montañistas actualmente desaparecidos, el año 2023 se ha convertido en un año récord en términos de mortalidad en el Everest.
Nepal alberga diez de las cumbres más altas del mundo, incluido el Everest, y recibe a cientos de escaladores cada primavera.