TAMAULIPAS.-El gobernador de Tamaulipas, Américo Villarreal Anaya, ha anunciado su compromiso de trabajar rápidamente en un proyecto presentado por la Fundación ISCM (Institute for Strategy and Complexity Management) con el objetivo de contribuir al saneamiento de aguas residuales en los principales municipios del estado. Este proyecto busca instalar plantas para la producción de hidrógeno verde como una forma de tratamiento de aguas residuales.
Durante una reunión celebrada en la Casa de Gobierno, el gobernador Villarreal se reunió con el embajador de la Fundación ISCM, Heinz Schneider, y el secretario de Recursos Hidráulicos del Estado, Raúl Quiroga Álvarez. En el encuentro, el gobernador instó a los responsables de los organismos operadores del agua presentes a aprovechar la experiencia exitosa de la Junta de Agua y Drenaje de Matamoros (JAD), que ya ha recibido la autorización del Consejo de Administración del organismo y del cabildo local para implementar el uso de hidrógeno verde en el saneamiento de aguas residuales.
La Fundación ISCM, con sede en Bruselas, Bélgica, explicó que el propósito de esta iniciativa es fortalecer la infraestructura hidráulica para el tratamiento de aguas residuales en Tamaulipas, promoviendo la generación de energías limpias a través de la instalación de plantas para la producción de hidrógeno verde. Se prevé que este mecanismo se desarrolle en ocho municipios del estado, y se complementará con la rehabilitación de obras de infraestructura hidráulica.
El gobernador Américo Villarreal resaltó que Tamaulipas es el primer estado generador de energías renovables y convencionales, y su ubicación estratégica le brinda ventajas competitivas. Por lo tanto, proyectos de esta naturaleza son bienvenidos y cuentan con el pleno apoyo del gobierno estatal.
Durante la reunión, Raúl Quiroga Álvarez, secretario de Recursos Hidráulicos, señaló que los municipios con potencial para la instalación de plantas de producción de hidrógeno verde son: Nuevo Laredo, Reynosa, Matamoros, Río Bravo, Victoria, El Mante, Altamira, Tampico y Madero.
Con esta iniciativa, Tamaulipas busca aprovechar su capacidad en la generación de energías limpias para abordar el desafío del saneamiento de aguas residuales, contribuyendo así a la preservación del medio ambiente y al desarrollo sostenible en la región.