TAMAULIPAS.-La agricultura en Tamaulipas enfrenta un futuro incierto debido a la falta de rentabilidad, lo que podría llevar a muchos productores a abandonar la actividad, advirtió Raúl García Vallejo, presidente de la Liga de Comunidades Agrarias de Tamaulipas.
García Vallejo detalló que los productores han sufrido un fuerte golpe económico, ya que no han logrado recuperar ni siquiera los costos de inversión de las siembras del ciclo Otoño-Invierno 2022-2023. Esta situación ha generado la preocupación de que muy pocos estén dispuestos a arriesgarse a continuar sembrando sus tierras.
En la actualidad, los agricultores reciben un promedio de 4,300 pesos por tonelada de sorgo, una cifra que no les permite cubrir los costos de producción. Se estima que la cosecha del ciclo Otoño-Invierno sea de poco menos de dos millones de toneladas de granos.
Cada año, se siembran alrededor de 750 mil hectáreas en el norte de Tamaulipas dentro del ciclo Otoño-Invierno. Ante esta situación, García Vallejo expresó su preocupación y manifestó: «La realidad de las cosas es que existen dudas de poder avanzar en el proyecto de siembra en la zona norte, pero esperamos que sea todo lo contrario y que se terminen estas dudas para poder rescatar al campo que está al borde de la quiebra desde hace varios años».
El presidente de la Liga de Comunidades Agrarias de Tamaulipas lamentó que el gobierno federal persista en negarle apoyos al campo, a pesar del papel crucial que desempeña en la seguridad alimentaria de los mexicanos. Esta falta de respaldo agrava la situación de los agricultores, quienes se enfrentan a una crisis de rentabilidad que amenaza la sustentabilidad de la actividad en la región.
Ante este panorama incierto, se espera que se tomen medidas urgentes para apoyar a los productores y asegurar la viabilidad de la agricultura en Tamaulipas, un sector vital para la economía local y la seguridad alimentaria del país.