Un paso histórico en la lucha por la seguridad pública en México se realizó este martes. Los gobernadores de Tamaulipas, San Luis Potosí, Veracruz y el secretario general de gobierno de Nuevo León firmaron el Convenio Marco de Colaboración y Coordinación en Materia de Seguridad Pública. Este acuerdo representa un esfuerzo conjunto para recuperar la paz y la tranquilidad en estas cuatro entidades.
«Estamos en una misma búsqueda para mejorar nuestros resultados en materia de seguridad y, para ello, estamos totalmente abiertos a la colaboración», dijo el gobernador de Tamaulipas, Américo Villarreal Anaya. Los políticos regionales planean compartir información, experiencia y recursos en la prevención y persecución de delitos.
El evento, que tuvo lugar en el Museo Tamux, reunió a los representantes de las cuatro entidades y a los secretarios de Seguridad Pública de cada estado. La firma del convenio marca un compromiso conjunto para proteger la legalidad, las personas, sus propiedades y para conseguir un modelo de convivencia más justo e inclusivo.
Las partes del convenio expresaron su determinación para erradicar la corrupción en las tareas de seguridad y reducir los niveles de violencia en sus respectivas entidades. Además, hicieron un llamado a todas las entidades federativas, a los tres niveles de gobierno y a los Poderes del Estado para unir esfuerzos en la lucha contra la delincuencia.
Cuitláhuac García Jiménez, gobernador de Veracruz, destacó la importancia de compartir información de inteligencia para prevenir que los grupos delictivos evadan a las autoridades al cruzar límites estatales. Añadió que los cuatro estados han registrado una disminución del 40% en el delito de homicidio doloso, destacando la necesidad de mejorar la comunicación para que la ciudadanía perciba los avances en seguridad.
El Secretario General de Gobierno de Nuevo León, Javier Navarro Velasco, concluyó que en su entidad también se registra una disminución en delitos del fuero común y enfatizó la importancia del diálogo en la resolución de conflictos de seguridad.
Este convenio histórico marca una nueva era de colaboración en la seguridad pública en México y promete aportar una nueva perspectiva en la lucha contra el crimen en estas regiones.