El cineasta tapatío presentó su más reciente película mientras reflexionaba sobre su conexión con el arte.
Guillermo del Toro celebró el estreno de “Frankenstein” en Norteamérica tras ser homenajeado en la 50ª edición del Festival Internacional de Cine de Toronto (TIFF).
Este evento tiene un valor sentimental para el director, quien considera a Toronto su “casa cinematográfica”, ya que ha rodado aquí gran parte de su filmografía, desde Mimic en 1997 hasta su más reciente trabajo.
Guillermo del Toro estrena Frankenstein en Toronto: ¿Qué significa para él este proyecto?
Durante la presentación de Frankenstein en el TIFF, Del Toro expresó:
“(Este proyecto) lo perseguí una y otra vez, y pensaba: ‘¿Por qué no está sucediendo?’. Porque deseaba con todas mis fuerzas que fuera una historia sobre un padre y un hijo, sobre mi padre y yo. Quería hacer eso. Con el paso de los años, entendí por qué; me di cuenta de que me tenía que convertir también en padre. Y luego se convirtió también en un tema sobre mí como padre, y sobre las posibilidades de fracasar de maneras similares a las que mi padre me había fallado. Ese dolor y esa belleza es lo que acompaña a la poesía del horror; que podemos hablar de temas delicados, emotivos y personales para ti y para quienes ven tus películas; yo lo he hecho durante 30 años”.
Del Toro se mostró muy conmovido durante su homenaje en el TIFF. En su discurso, subrayó:
“Vivimos en un mundo que ahora quiere decirnos alto y claro que el arte no es importante. Quieren insistir en que esto se puede hacer con una aplicación, que lo puede hacer cualquiera y que es simplemente un producto. Quieren que estemos insensatos, separados, sin esperanza. Y no podemos permitir que eso suceda”.
Además, el cineasta comentó sobre el significado del evento:
“Es muy emocionante. Es el final y el principio de algo nuevo. No sé muy bien hacia dónde apunta la chancla, pero ya puedo mirar para otro lado”.
Aunque Del Toro aseguró que planea tomarse un mes de descanso tras Frankenstein, admitió con humor:
“Nunca he sabido descansar, voy a tratar de aprender. Me voy a preparar una película de crimen que se filma en Nuevo México, y luego un stop motion”.
Al referirse a su vida fuera de México, Del Toro compartió:
“Todo, todo. Realmente, desde el secuestro de mi papá ha sido una suerte de exilio. Todos los días extraño, y más ahorita”, mencionando también su amor por la comida mexicana: “pipiolo, peinecillo con tortilla recién hecha, carne en su jugo y tortas ahogadas de Leo”.
Reencuentro creativo en Frankenstein
El estreno de Frankenstein no solo significó el regreso de Del Toro a Toronto, sino también un reencuentro con su equipo creativo.
El director volvió a trabajar con colaboradores clave como Dan Laustsen (director de fotografía), Guy Davis (diseñador de producción), Kate Hawley (diseñadora de vestuario) y Tamara Deverell (diseñadora de producción). Del Toro destacó la importancia de tener a su mejor equipo en esta película:
“Más que repetir, todas las décadas que llevo han sido para juntar al equipo para esta película, entonces toda la gente que ha trabajado conmigo, la mejor de esa gente, está en este equipo”.
En cuanto a la música, Del Toro se reunió nuevamente con Alexandre Desplat, quien previamente colaboró en The Shape of Water, película por la que ganó un Oscar. Desplat comentó:
“Siempre es un placer trabajar con Guillermo. Le encanta la música, y le gusta mucho colaborar, escuchar lo que sugiero, lo que intento inventar para sus películas. Frankenstein fue un trabajo duro, como todas las películas, pero esta, en particular, tiene muchísima música. Creo que de todas las películas que hemos hecho, es la que tiene más música, además de una orquesta enorme”.
Reconocimientos y trayectoria
Durante la gala del TIFF, Del Toro recibió el TIFF Ebert Director Award, junto a figuras como Jodie Foster, Lee Byung Hun y Brendan Fraser, quien fue el presidente honorario. También se reconocieron a otras personalidades como Idris Elba y Catherine O’Hara.
Anita Lee, Chief Programming Officer de TIFF, expresó:
“Guillermo ha dicho que Frankenstein ha sido un proyecto que le ha apasionado desde hace mucho tiempo. Nosotros pudimos ver Frankenstein a principios de abril, en su sala de edición, cuando estaban terminando de editar las imágenes. Nos sentimos muy, muy privilegiados de que Toronto representa la premiere de la película en Norteamérica”.
Del Toro, quien trabajó estrechamente con TIFF a lo largo de los años, agradeció la oportunidad de colaborar con la comunidad canadiense:
“La idea siempre ha sido promover el talento canadiense en la creación de sets, vestuario, todo. Frankenstein es una película exhaustiva, muy grande, muy complicada, y toda la gente en Canadá ha ido escogiendo lo que hace a lo largo de tres décadas”.