CDMX.-El sistema de refugio en México está sometido a una creciente presión debido al incremento en el número de solicitudes de asilo, la insuficiencia de recursos para su procesamiento y la falta de alternativas legales de estancia para extranjeros, según advierte la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR).
En su Informe de Resultados 2022 titulado «Caminando hacia la Integración», presentado recientemente, ACNUR destaca que por segundo año consecutivo, México se encuentra entre los países con mayor número de nuevas solicitudes de asilo, en un contexto en el que el desplazamiento forzado continúa aumentando en todo el hemisferio.
En 2021, México registró 131,414 solicitudes de asilo, mientras que en 2022 la cifra fue de 118,756 solicitudes.
El informe señala que durante el año 2022, México experimentó un notable aumento en el número de inmigrantes venezolanos, cubanos y nicaragüenses que llegaron al país y solicitaron asilo, en comparación con el año anterior, cuando la llegada repentina de personas haitianas fue el principal factor.
Las restricciones migratorias impuestas por Estados Unidos, como la aplicación del Título 42 y el programa «Quédate en México», han representado una presión adicional sobre la capacidad de procesamiento de la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar), que ya se encuentra sobrecargada.
ACNUR destaca los esfuerzos realizados por la Comar, en colaboración con ACNUR y su Iniciativa de Control de Calidad (QAI), para aumentar su capacidad de procesamiento. Desde 2018, la Comar ha casi cuadruplicado su capacidad, con una tasa promedio de reconocimiento del 63%.
Sin embargo, a pesar de los avances logrados, los recursos de la Comar siguen siendo limitados y se necesitan esfuerzos adicionales por parte del gobierno mexicano para asegurar un mayor apoyo financiero, con el objetivo de aumentar su capacidad operativa e infraestructura y así satisfacer las necesidades actuales.
ACNUR destaca en su informe que ha colaborado con la Comar para aumentar su presencia física en el país, fortalecer sus capacidades técnicas y mejorar la eficiencia en el procesamiento de solicitudes de asilo. Esto incluye el reclutamiento de personal, la adquisición de oficinas móviles, la compra de equipos de impresión y escaneo, el pago de gastos operativos y la contratación de servicios de interpretación.
Además, ACNUR ha brindado apoyo a 132 albergues en 48 ciudades durante 2022, mejorando su infraestructura, proporcionando personal adicional, distribuyendo artículos no alimentarios y aumentando su capacidad de recepción. A través del Programa de Integración Local, se ha brindado asistencia para la reubicación e integración a 12,796 personas refugiadas, la cifra más alta hasta la fecha.